El informe preliminar de la autopsia realizada ayer en el cuerpo de Fernando Leyría confirmó que las lesiones provocadas durante el intento de robo ocurrido en su domicilio le produjeron un deterioro en su salud de una magnitud tal que posteriormente derivaron en la muerte.
Fuentes de la investigación aseguraron que esto derivará en un cambio de calificación legal del hecho: de robo agravado por lesiones graves ahora el caso se investigará como homicidio en ocasión de robo.
Como consecuencia, la escala de las penas aplicables también se modificarán: de prisión de 5 a 15 años, el nuevo tipo aplicable prevé sanciones de 10 a 25 años de prisión.