Catorce personas entre 3o mil en el Estadio Kempes pudo parecer una nadería pero no lo fue.
La mayoría de esos 14 jamás había pisado el templo del fútbol cordobés donde, aunque en forma amistosa, jugaban dos de los equipos más grandes de la Argentina. Uno festejando el Bicampeonato y el otro su entrada al Máximo Torneo subcontinental después de 17 años: la Copa Libertadores de América
Jugaban Talleres y Boca.
Nada más y nada menos
O Bocalleres o Taboca
Para muchos hinchas xeneixes de esa pequeña delegación, ver al Apache Tévez haciendo elongaciones a pocos metros de ellos, fue como tocar el cielo con las manos.
No importaron las dificultades para llegar al Estadio, los amontonamientos o la espera para ubicarse en la platea cedida por la Agencia Córdoba Deportes. Estaban ahí, donde muchos hubieran querido estar.
Antes del partido los fuegos artificiales, después el encuentro. El resultado fue lo de menos, después la ovación a Kudelka … una noche inolvidable para los pibes y pibas de la Escuela Varillense de Deporte Adaptado.
En definitiva: una experiencia increíble
L.A.A.
FOTOS: SANDRA FLORES
