Para el director del Sanatorio Garcés, la situación de la salud privada es crítica y se viene deteriorando desde hace años.
El Dr. Gustavo Insaurralde dijo por FM IDENTIDAD que en la provincia de Córdoba en los últimos años cerraron 150 clínicas y las que subsisten son muy difícil de sostener.
El facultativo afirmó que están pagando incrementos salariales del 8% todos los meses mientras que los ingresos de las obras sociales no aumentaron.
“El desfasaje es terrible y ni pensar que se descomponga algún equipo”, advirtió el médico, quien también reveló que hay algunos medicamentos que tuvieron subas del 900% o que directamente están en falta.
Una situación similar se da con determinados insumos para intervenciones quirúrgicas, lo que provoca que haya pacientes que tienen que esperar mucho tiempo para que llegue la prótesis pedida y no otra que manda la obra social, más barata.
“La política de salud no es solo hacer hospitales” recalcó Insaurralde, y confirmó que cada vez hay menos profesionales que atiendan por obras sociales, porque la que mejor paga una consulta la abona 2800 pesos y a 90 días.
También advirtió que los sanatorios de la ciudad tienen muchos empleados que viven de la Salud y que son comparables con muchas industrias de Las Varillas.
Y lamentó que las clínicas locales que hicieron un gran esfuerzo por crecer están hoy sin poder seguir en ese rumbo debido a estas limitaciones.